Spaguetti con crema de pollo sazonada con cebollines dulces

Esta vez quisé mezclar varias técnicas en esta receta, como todas las de mi blog, el resultado fue una receta super fácil de hacer y sorprender o maravillar a tu familia o comensales.

Los protagonistas de esta crema o salsa para spaguetti, fueron los cebollines y ajos porros, o puerros en otros países, caramelizados con un poco de margarina y miel, hasta que quedaran bien dorados. En realidad quería que fuera de cebolla caramelizada pero abrí la nevera y no tenía cebollas, y de eso te trata este blog de solucionar. El sabor es distinto pero tiene su toque.

Para comenzar necesitamos:
-Cebollines y ajo porro cortado en tiras (como en la foto 1)
-Miel o azúcar para el caramelizado
-En un cazo, batir dos tazas de caldo de pollo con un poco de maicena, puedes añadirle a la mezcla comino, ajo en polvo o bien usar cubito de caldo de pollo, yo prefiero ingredientes naturales, y condimentos naturales, pero si no están es válido hacer un poco de trampa (foto 2).
-Tiras de pechuga de pollo desmenuzadas y algunas piezas como muslo y alas.
-2 cucharadas de natilla o crema de leche, pueden usar cualquier queso cremoso, no se limiten.
-Un poco de queso de año en polvo.
-Sal y pimienta al gusto.

Manos a la obra:
Hervimos las piezas de pollo junto con las tiras, en un poco de agua con sal. Este mismo caldo es el que usaremos para la mezcla de la maicena.

Mientras iremos rehogando los cebollines y ajo porros, en la margarina con un poco de miel, a esta mezcla se le puede echar alguna salsa de ajo para explotar más el sabor. Cuando esten dorados sacar del fuego y reservar.

En una ollita o sarten caliente, agregamos  la nata o crema de leche líquida cuando empiece a hervir o a calentar bastante vertemos la maicena con el caldo de pollo, y siempre moviendo a fuego bajo, si consideran que espesa mucho, puedes ir vertiendo caldo de pollo sin maicena para ir aguando la salsa,no mucho; a la vez insertamos el pollo cocinado para que agarre el sabor de la salsa. Esperamos un poco a fuego bajo y al final insertamos los cebollines caramelizados,no todos, el queso de año en rallado y un poco de sal y pimienta al gusto  guarda un poco para la decoración. Recuerden que la nata lleva sal al igual que el queso de año, así que traten de probar la salsa para que no quede muy salada.

¡ Listo! Sólo falta la pas

ta larga para comernos esta deliciosa salsa, ah y por supuesto aquí en Venezuela, no se puede comer pasta sin las respectivas tajadas o platano frito como contorno.